La presencia judía en España es reducida, si
se compara con la de otros países europeos o si se opone a otros colectivos
religiosos no católicos presentes en la sociedad española. Sin embargo, está
conociendo una evolución sociológica interesante.
En
1992, el reconocimiento oficial del judaísmo por la España democrática no solo
fue aquel acto emblemático de reparación de una realidad histórica de
reconocimiento de la presencia de comunidades modernas, también fue para los
judíos una señal de apertura, hacia el exterior de sus comunidades y también
apertura religiosa e ideológica dentro de las mismas.
En
el aspecto étnico-religioso en relación entre origen geográfico y doctrinas, se
ha producido una evolución clara. Antes las corrientes religiosas del judaísmo
español estaban muy vinculadas a los orígenes geográficos de sus miembros. Sin
embargo, actualmente la adhesión de las distintas corrientes ya no se pueden
desvincular de las profundas transformaciones sociales experimentadas en todos
los países occidentales.
Finalmente
en el judaísmo español existe una doble influencia que combina el judaísmo
ortodoxo (moderno) con unas corrientes progresistas procedentes de los Estados
Unidos muy activas y abiertas ante los nuevos retos ideológicos de la sociedad
posmoderna
Corrientes del
judaísmo español.
A
continuación se detallan las principales tendencias hoy en día en España.
Tomando como referencia central el judaísmo ortodoxo, de más religioso a menos
religioso se presentan de la siguiente forma:
·
El judaísmo “ultra
ortodoxo”.
·
El judaísmo
“ortodoxo” este suele adoptar el nombre de “ortodoxo moderno”.
·
El judaísmo
“reformado” que tiene dos vertientes: El judaísmo tradicionalista y el liberal.
·
El judaísmo
“laico” que se defiende de ser a-religioso.
Interpretar el
judaísmo plural en la sociedad española actual:
Existen
varias lecturas, de entre las cuales una dialéctica que agrupa dos niveles: Uno
interno al colectivo judío y otro externo que descansa en relación de los judíos
con España y la sociedad global.
·
A nivel interno:
Para
los judíos la reconfiguración del judaísmo y de la judaicidad en varias
sensibilidades no es exclusiva en España. Es más bien la expresión tardía de la
Península Ibérica de un movimiento que ya se ha dado en otros países de Europa
desde hace ya unas tres décadas.
·
A nivel externo:
Están
presentes, evidentemente, el factor del “reto identitario”, afirmándose como
judío en una sociedad de profundas raíces católicas. Y el factor demográfico
intentando mantener un número de judíos que permita al judaísmo vivir y
transmitirse.